Las Tres Mellizas, los populares personajes diseñados por la ilustradora Roser Capdevila en 1983, aparecen por primera vez sobre un escenario como marionetas de hilo. Después de una gran trayectoria por el papel impreso y la televisión (la serie llega a 130 países en 29 lenguas diferentes), Ana, Teresa y Helena debutan en el teatro.

Una trastada le ofrece una excusa a la Bruja Aburrida para mandarlas a Barcelona a principios de siglo XX, donde Las Tres Mellizas conocen al arquitecto Antonio Gaudí y viven diversas aventuras basadas en anécdotas reales del periodo.